La firma italiana sacó su primer modelo RR en 2013, dando inicio a uno de los más longevos en la historia del enduro europeo. La Beta RR 250 2T ha sido sin duda la preferida por el público amante del off-road, ya que su cilindrada la hace una moto muy manejable, y los 2T permiten una entrega de potencia explosiva y contundente. Una moto que se ha ido renovando con los años, pero que no ha experimentado una evolución repentina que la aleje de su esencia inicial, sino que ha ido incorporando ligeros cambios.
Uno de los cambios más significativos llega en 2017, cuando la marca se adapta a las normativas E4 e incluye la inyección de aceite. El cambio en las suspensiones llegaría un par de años más tarde, incluyendo el ajuste de precarga sin herramientas, lo que la convertían en una auténtica todoterreno totalmente configurable.
Beta no solo se ha conformado con hacer una moto excelente con su modelo RR, sino que ha buscado la perfección siempre con la gama Racing, que incluye una serie de mejoras progresivas y unos acabados que marcan la diferencia. En su modelo 2024 nos llama la atención su culata con doble bujía (algo que no veíamos desde las Bultaco), y que busca entregar una curva más redonda y otorga al piloto una mayor precisión sobre la potencia que entrega su motor.
Finalmente, en los últimos años, la Beta RR 250 2T ha recibido otra serie de modificaciones que afectan principalmente a su ergonomía. La forma del chasis, de la plástica, la posición de las estriberas... Además, la suspensión ha sido mejorada de forma que la configuración se adapta más a terrenos abruptos e irregulares, mejorando y facilitando su pilotaje.