Para que un casco sea cómodo no debo mirar sólo su interior. La ventilación es un aspecto muy importante, sobre todo si lo vamos a llevar durante mucho tiempo. Tenemos que fijarnos en las entradas de aire y las zonas de extracción, y en cómo se distribuye el aire, para que fluya por su interior evitando que se acumule la humedad. Es fundamental que todas las partes interiores se puedan desmontar y lavar para evitar la acumulación de bacterias. Debe disponer, también, de filtros desmontables en la zona de la boca. Pero para que un casco resulte cómodo es imprescindible que la talla sea la correcta, y en esto no nos podemos equivocar. No siempre coinciden las tallas en las diferentes marcas, por lo que deberás probártelo para estar completamente seguro de que se trata de tu talla. Si lo compras online, y decides tomar ese riesgo, al menos asegúrate de que en la tienda donde lo compres se toman la molestia de calcular la talla de ese casco en concreto en función del contorno de tu cabeza midiendo justo por encima de las cejas. El peso, como es lógico, también influye en la comodidad, los de fibra de carbono son los más ligeros.